
Lo cierto es que no dejan de ser lamentaciones. Es preciso adaptarse y reciclarse y dejar de mirarse tanto el ombligo. En un foro con otros periodistas, muchos de mis compañeros señalaban que el apogeo de los blogs ha hecho que se publique de todo y que 'se trague mucha mierda', por lo que están convencidos de que se necesita educar sobre la información.
En mi opinión, la sociedad no es tonta y esas cosas se aprenden solas porque forman parte del aprendizaje corriente de las nuevas generaciones. Y dentro de esa absorción de información debe estar el saber dilucidad qué informaciones son serias y rigurosas y cuales no, sin necesidad de crear foros educativos para ello.
Ayer se celebró en Guadalajara un encuentro titulado "¿Hacia dónde y para qué el periodismo del siglo XXI?", donde el director de El País, Javier Moreno dijo: "La función de un periódico, sea cual sea la forma en que se presente ante los lectores, es sustentar un debate público que garantice la calidad de la democracia". Vale la pena rescatarlo.
Por su parte, Lluís Basset, director adjunto del mismo diario dijo, en la presentación de su último libro, que el periodismo, "sea cual sea su soporte, es indispensable para una sociedad democrática" por lo que los periodistas debemos adaptarnos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario